- El intervencionismo de PSOE y Ciudadanos acaba con la capacidad de las juntas municipales para resolver los problemas que les trasladan los vecinos
- El PP ofrece estabilidad institucional frente a la parálisis, intervencionismo y reparto de sillones de PSOE, Ciudadanos y Podemos
- Tras la moción de censura, el tripartito ha extendido su política errática y de parálisis social y económica a las pedanías
- Marco Antonio Fernández: “Los vecinos de las pedanías están pagando injustamente el precio del sectarismo de la coalición de izquierdas que gobierna en la Glorieta”
12, marzo, 2022.- El Grupo Municipal Popular propone que se les devuelva las competencias a las juntas municipales para la gestión de sus pedanías. El tripartito instalado en la Glorieta tras la moción de censura que sacó del gobierno al Partido Popular de manera injustificada ha terminado con el asalto a las pedanías, dejando sin competencias a los alcaldes y alcaldesas pedáneas.
El PP denuncia que la coalición de izquierdas que forman PSOE y Ciudadanos tras la moción de censura ha extendido su política errática y de parálisis social y económica a las pedanías, frenando la vertebración territorial, el fomento y el crecimiento social y económico de los barrios y las pedanías de forma homogénea para defender la unidad del municipio y contribuir al avance de todas las zonas que había impulsado el equipo de Ballesta. “Las Juntas Municipales son el órgano más cercano a los ciudadanos, ni nuestros vecinos ni el Partido Popular, acepta la politización y el sectarismo” señala el concejal Marco Antonio Fernández.
Tras la moción de censura cerca de 240.000 murcianos se han visto afectados por la burocratización de la administración complicando la solución de aspectos del día a día de los vecinos. “En el último año de gobierno socialista, las Juntas Municipales han reducido su gasto en más de un 50 %, es decir, 6 millones de euros menos que se están gastando en las pedanías por una decisión de querer eliminar un órgano que tan buenos resultados ha dado en nuestro municipio”.
El PP ha fomentado la vertebración territorial de todo el municipio
Frente al oportunismo político, el PP considera que ahora, más que nunca, la sociedad necesita políticos que generen confianza y coherencia, y que transmitan moderación y mesura frente al oportunismo político.
Las mociones de censura injustificadas en las pedanías ejecutadas por PSOE, Ciudadanos y Podemos demuestra que al tripartito solo le interesan los sillones e impedir que los pedáneos gestionen impidiendo a las Juntas Municipales hacer cualquier obra en el municipio sin autorización previa. La ambición del gobierno de La Glorieta ha desmontado la capacidad de gestión y la participación vecinal de las Juntas Municipales tras 40 años de historia, maniatando a los pedáneos impidiendo que “los alcaldes no puedan atender cuestiones básicas en sus localidades como el simple arreglo de una acera o un bordillo”.
Esta nueva maniobra del tripartito demuestra solo el afán intervencionista y la nula creencia en la autonomía de nuestras pedanías.
El edil popular explicó que “el Partido Popular combinó de una manera segura la eficacia en la gestión con la seguridad jurídica. Esta nueva maniobra del tripartito demuestra solo el afán partidista y la nula creencia en la autonomía de nuestras pedanías” aboga Marco Antonio Fernández.
Los populares piden que se levante la parálisis que ejerce sobre proyectos y obras que se deben ejecutar en las pedanías. Una actitud que ha condenado al retroceso a miles de murcianos que viven en las pedanías del municipio de Murcia.
El Ayuntamiento de Murcia es una institución venerable y honorable, con 750 años de historia, y no se puede convertir en un intercambio de cromos
Las mociones de censura en las pedanías son un reflejo del autoritarismo y del sectarismo político de la coalición de izquierdas del Ayuntamiento de Murcia. Esta decisión injusta y arbitraria desprecia la decisión de nuestros vecinos, boicotea la capacidad de gestión de los pedáneos y hace que sean menos libres. El Ayuntamiento de Murcia es una institución venerable y honorable, con 750 años de historia, y no se puede convertir en un intercambio de cromos.
Los murcianos hace un año sintieron el asalto a La Glorieta, y durante este tiempo no ha habido ni un proyecto nuevo, ni una sola iniciativa pero sí han tenido tiempo para llevar a cabo mociones de censura injustificadas en 20 pedanías murcianas.