17, diciembre, 2021.- La portavoz del Grupo Municipal Popular, Rebeca Pérez, ha lamentado que la política de brazos caídos que está siguiendo el PSOE con su gestión del transporte público demuestra su renuncia a mejorar un servicio caduco y obsoleto, mantenido por los socialistas de manera injustificada.
La política del PSOE en movilidad se basa en que sea el Gobierno regional el que les solucione los problemas generados por su sectarismo y falta de interés.
Provoca sonrojo que la edil socialista Carmen Fructuoso pida ahora una mesa de coordinación con la Consejería de Fomento después de no acudir a la reunión de la Mesa General del Transporte celebrada el 15 de noviembre a propuesta del Gobierno regional para articular un marco común de cara a la entrada de los nuevos servicios que se produjo el 3 de diciembre.
La actitud de la concejal dejó en evidencia al Ayuntamiento de Murcia, ya que a esa cita de coordinación sí acudieron los responsables de los consistorios de Cartagena y Lorca.
Por ello, Rebeca Pérez ha señalado que “¿qué es lo que tiene que pasar para que el equipo del socialista Serrano asuma de una vez las responsabilidades que le competen en materia de transporte pública? Su actitud es una tomadura de pelo para los usuarios”.
El PP en Murcia lleva meses advirtiendo de la necesidad de que exista una relación fluida entre el Ayuntamiento y el Gobierno regional para que el transporte público que se presta esté lo más coordinado posible entre las administraciones.
Sin embargo, los socialistas han roto todos los puentes de unión con la Consejería, al contrario de lo que han hecho todos los consistorios de todos los colores políticos del área metropolitana de Murcia, como son Santomera, Beniel, Alcantarilla, Molina de Segura y Las Torres de Cotillas.
El PSOE se limita a echar balones fuera y culpar a los demás de su incapacidad para dirigir cuestiones que se sabe desde hace 6 años que serían competencia del Ayuntamiento.
